«Cada progreso debe impulsar a todos los demás ámbitos a progresar con él, de lo contrario se produce un desequilibrio inevitable que lleva siempre a la desgracia.» JR
El mundo ha abierto tantas nuevas posibilidades que hoy necesitamos a millones de especialistas para poder lograr un progreso en cada ámbito distinto. Cada vez resulta mas evidente la necesidad de especializarse en algo, ya que somos incapaces de abarcarlo todo.
Hoy los cambios se suceden a tal velocidad, que el concepto del sabio que antiguamente se refería a aquellas personas que lo sabían todo, ha tenido que cambiar.
Antiguamente el conocimiento era infinitamente menor en cantidad. La educación permanecía estática durante décadas porque realmente no se producían los suficientes cambios en el mundo, como para necesitar modificar la enseñanza. Un profesor enseñaba durante toda su vida los mismos conceptos porque éstos no habían cambiado, por lo cual actualizar la información no era necesario. Hoy sin embargo, ningún profesor asiste a clase sin presentir que aquello que contiene su temario, pueda ser viejo la semana que viene.
La especialización se ha vuelto la única forma para que un profesional pueda asimilar los cambios permanentes que se suceden en su campo. Y no hay otra manera de lograr un avance en los distintos campos, que no precise de la especialización del individuo.
Pero el surgimiento de la especialización ha producido a su vez, una desconexión inevitable. Cualquiera que esté metido totalmente en un tema, pierde la posibilidad de estar a su vez informado y al tanto de todos los demás campos que están a su alrededor. Esto es inevitable, ya que aunque lo intentemos, nuestro tiempo es limitado para poder cubrirlo todo con la misma eficacia e intensidad.
Esto ha dejado un espacio libre que necesita de personas que sean capaces de conectar las especializaciones entre sí. Surge hoy la necesidad de conectar a las distintas disciplinas y encontrar la manera de establecer una comunicación entre ellas que produzca un avance conjunto.
Los progresos conjuntos son imprescindibles para lograr una evolución, ya que el descompasamiento entre los distintos avances sólo crea desequilibrio.
Hay un punto en donde algunas ramas de la ciencia ya no pueden avanzar y no saben por qué, pero hay algo que les detiene. Aquello que les detiene es la falta de evolución en otro ámbito al que inevitablemente necesitan para poder seguir avanzando, sin convertirse en un riesgo. Es por eso que la evolución de las distintas disciplinas necesita emparejarse constantemente para lograr así una continuidad y un equilibrio.
La necesidad de conexión entre las distintas disciplinas, relacionándolas entre si y enriqueciéndolas mutuamente, se ha vuelto un nuevo desafío para la Educación; que ya no puede permanecer estancada, sino que debe mantenerse en continúa evolución de la mano de los nuevos descubrimientos que la ciencia trae consigo.
La educación tiene que motivar r esta habilidad de conectar lo diferente, para lograr encontrar similitudes entre todo aquello que a simple vista parece ser muy distinto. Dándole al futuro especialista, la posibilidad de una nueva perspectiva que le genere a su vez, nuevas inquietudes y posibilidades inexploradas.
La educación logrará así valorizar no sólo a la especialización; al hacer consciente al especialista de que su trabajo es importante y necesario en la construcción de nuevos modelos y descubrimientos; sino que también fomentará el alimento entre muchas otras disciplinas que le ayudarán a lograrlo.
Crear una conciencia en la que todas las partes forman parte de un todo, el cual no puede ser abarcado sin contar con todas ellas. Hoy nos vemos frente a un nuevo mundo que es demasiado grande para abarcarse sólo desde la parte y que necesita de todos los ámbitos para seguir evolucionando.
Todos somos necesarios desde nuestra especialidad en la construcción de un todo distinto, que no sólo represente a cada uno, sino que nos haga igual de responsables a todos.
Necesitamos un mundo que nos represente y que nos contenga a todos. Y esto sólo será posible a través de la conexión entre todo aquello que parece ser diferente pero que debe trabajar en conjunto para lograr una evolución completa que incluya la evolución de la conciencia.
Nuestra diversidad se ha vuelto hoy un valor para construir progreso. Aquello que el siglo xx consideró un obstáculo, hoy es sin duda nuestro valor añadido.
No hay otro modo de generar progreso que uniendo toda nuestra diversidad con un objetivo común, que es el de lograr la evolución del ser humano en todas sus dimensiones.
Darle progreso a un ser primitivo es tan riesgoso, como darle energía atómica a un mono. El resultado fue Hiroshima. La misma energía que destruye, en manos de un ser evolucionado crea.
JR.
«El progreso es avanzar en una sola dirección, pero la evolución es avanzar en todas las dimensiones y esto sólo se logra incluyendo a todas las partes» JR