«Conciencia Verde»

«El objetivo de todo progreso debe ser evolucionar al hombre, porque desde allí todas las demás evoluciones vendrán por añadidura» JR

ciclodevida-380x380

El mundo ha comprendido que el movimiento circular de nuestro planeta no es sólo un movimiento, sino un comportamiento. El movimiento circular simboliza la evolución infinita que no tiene, ni principio ni fin y que para existir necesita de una fuerza que impulse a su movimiento constante. Este es el comportamiento que caracteriza a toda la Existencia.

El movimiento constante habla a su vez de un cambio permanente, que se repite de la misma manera en que se suceden todos los ciclos vitales de la Existencia.

La vida necesita del movimiento circular para matenerse viva y es por eso, que todo aquello que implique gestación de vida, tiene forma redondeada.

Todo el Universo hace referencia a este movimiento circular, que es a la vez generador y continuidad, ya que cualquier círculo para existir necesita de una fuerza que incluya a cada uno de sus puntos repetidamente, una y otra vez y de forma continuada para poder preservarse siendo un círculo.

Esta conciencia verde que ha despertado en el siglo 21 ha logrado asociar a este movimiento circular y transformador, también a las cosas materiales.  El reciclado de las cosas o su transformación en algo distinto de forma transitoria, es aquello que permite que los procesos se reinicien una y otra vez, manteniendo un equilibrio vital.

La conciencia verde surge como resultado de otras evoluciones, entre ellas la tecnológica y la científica, que aportan constantemente nuevos descubrimientos que provocan la adhesión de otros ámbitos.

El ser humano intenta ahora sumarse a la evolución que plantea la Ecología, motivado principalmente por el desequilibrio natural que azota a nuestro planeta.  La observación  sobre las catástrofes actuales que afectan de manera directa al bienestar humano, despierta una conciencia nueva, que se transmite sobre todo a las nuevas generaciones.

Las desgracias ya están aquí y esto es lo que ha motivado a la conciencia ecológica. La conciencia ecológica no ha llegado antes de la desgracia, sino a partir de ella. Y la razón por la cual toda evolución tiene lugar siempre después de la desgracia, es porque la conciencia del hombre, nunca es para nosotros una prioridad en el orden evolutivo.

Esta alteración del orden natural de las cosas es lo que genera a la desgracia; que funciona como un despertador para la conciencia dormida del hombre, que se ve siempre sorprendida por ella. La ceguera del ser humano es en realidad lo que provoca a la desgracia, que siempre nos sucede como un resultado a la falta de previsión que surge de nuestra falta de conciencia.

La desgracia es desafortunadamente, el despertador que nos levanta siempre tarde.

Pero nuestra conciencia sobre los daños no debería incluir solamente a los daños materiales como nos plantea la Ecología, sino también al daño humano que genera la desgracia.

Si todo se recicla y se transforma permanentemente en algo distinto sería importante saber en qué se transforma entonces el sufrimiento del hombre.

Hacia dónde va y de qué forma regresa. Hacia dónde van las lagrimas de dolor de los pueblos sometidos y de qué forma ese sufrimiento nos llueve después a todos. Porque de la misma forma en que todo residuo se convierte en algo distinto, el dolor también lo hace.

La conciencia verde no debería estancarse sólo en los elementos,  sino avanzar en el contagio hacia todas las demás evoluciones aún pendientes que tiene el ser humano, además de su responsabilidad con la naturaleza.

No debemos limitarnos a preservar la forma, sino también a preservar la dignidad del hombre. El hombre debe ahora preservar al hombre y empeñarse en reciclar su dolor, transformando su sufrimiento en algo distinto.

La transformación natural del dolor es la autodestrucción. Pero como toda transformación, ésta posee también dos polaridades. Siendo concientes de esto, deberíamos impulsar al dolor en una dirección distinta para convertir al sufrimiento en aprendizaje.

Si esto sucede, entonces la Ecología habría tenido algún sentido. ¿De qué nos sirve sino preservar la naturaleza para un hombre destruido?

Si el Universo establece un orden de prioridades para todas las cosas, quizás la Ecología sólo sea un tipo de progreso demasiado verde aún para un ser humano que tiene todavía una importante transformación pendiente.

 

JR

 

«Si el llanto de la gente va hacia el mar, en poco tiempo nos lloverá a todos» JR

 

 

 

 

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s